sábado, 26 de julio de 2014

19-20 julio 2014 Eiger Ultra Trail 101km 6.700m desnivel positivo

Living my life!! :)

El fin de semana anterior, decidimos con unos amigos hacer un entreno “matinal” que se convirtió en una travesía de 28horas non-stop, saliendo el viernes a las 21.30 de la noche y acabando el sábado a la 01.30 de la madrugada, hicimos la travesía “Els Refugis del Torb” y disfrutamos muchísimo, preciosa! Eso sí, yo ya estaba agotada nada más empezar porque había dormido poquísimo los días de antes y mi ritmo no fue el de siempre pero gracias a mis compis por esperarme! :) Fue un gran entreno y aventura, grandes momentos como la luna llena del viernes por la noche que nos permitió estar un buen rato sin frontal, una luna enorme que alumbraba todo nuestro camino e incluso proyectaba nuestras sobras, o el helado viento en la parte francesa justo antes de subir al Canigó que al final desestimamos porque hacía mucho frío y era peligroso,  me tuve que poner hasta la ropa de emergencia… Realmente la importancia de salir siempre a la montaña bien preparado… Hacía tanto frío que nos metimos incluso 15’ en un refugio guardado a la madrugada para comer algo.



Pico del Noucreus 2.799m
Pico del Noucreus 2.799m


…Y unos días después, el jueves ya cogía el avión para irme a una carrera que me apetecía mucho a un lugar que presentía que me encantaría y así fue… Grindelwald. Itinerirario: avión hasta Zurich y allí 3 cambios de tren hasta llegar a Grindelwald, población germana de ambiente montañero y también con turistas, a los pies del Eiger, un escenario increíble, muy bonito… Era incapaz de dejar esa gran montaña, me parecía fascinante.

Eiger desde la ventana del hotel




Un placer encontrarme por esas calles con Jaume Amiel y Jordi Xaus y sus famílias, que también como yo corrían la distancia larga del Eiger Ultra Trail, 101km y 6.700m positivos, me habían hablado tan bien que tenía muchas ganas, no sería fácil pero pensaba que se haría super placentera… De hecho fue Jaume Amiel quien me presentó esa carrera cuando coincidimos en noviembre en la Ultra de Collserola donde yo estaba en la organización (Gràcies Jaume!! :) ).


Viernes a recoger el dorsal por la mañana, todavía no había mucha gente, fue muy rápido, me revisaron la larga lista de material obligatorio y de nuevo para el hotel a descansar y dormir bien porque la carrera empezaba a una hora intempestiva…

Recogiendo dorsal
Feria del corredor
Línea de llegada

Por la tarde junto con Jaume y Jordi, y 2 corredores más catalanes (Benjamín y David), fuimos al briefing y nada nuevo que no hubiera leído ya, eso sí, todo muy buen organizado aunque faltó el detalle que en lugar de hacer traducción literal al inglés, apenas dijeron 2 o 3 frases en inglés y el resto en alemán, menos mal que la presentación también estaba en inglés y francés.

Empieza briefing (en la foto Iker Carrera, ganador del año pasado)
En el briefing
Y ahora sí, después del briefing, ducha, cena tranquila, a leer un rato de actualidad y genial porque me cogió el sueño rápido… Y a las 2.15am sonaba el despertador… me costó un rato salir de la cama, genial porque no hacía nada de frío, a las 3.15 estaba “desayunando” cuando quizás mucha gente todavía en otra parte del  mundo todavía iba por la 2ª copa de la noche jeje… Sobre 3.50 llegaba al punto de salida, genial porque estaba a 5’ minutos del hotel, realmente eso es un placer.

Allí me encontré con Benjamín y con David, y luego con Jaume, comentamos un rato la jugada y a pasar los últimos minutos de nervios. A nuestro alrededor sólo se oía alemán, sabíamos que había unos sevillanos porque dormían en el camping de Jaume pero ya está.
La temperatura era muy buena, camiseta de manga corta, chaleco corta vientos y Buff, perfecto.

Antes de salir


Y una salida muy atípica, una canción “muy light” y con el mismo tono que estaba hablando la persona en alemán que de vez en cuando decía alguna palabra en inglés, 4.30 sonó el pistolezo de salida sin haber hecho ninguna cuenta atrás ni grito especial, nada, pim-pam jeje…

El perfil era todo subida, salíamos a poco más de 1.000 metros y teníamos que subir a casi 2.250m así que tocaba poner buen ritmo pero sin quemarse porque subía mucho, salí trotando con muy buenos sensaciones pero cuando vi la pendiente aflojé que quedaba mucho…

Al principio asfalto y más asfalto y luego pista ancha hasta que pasó a convertirse en más tramo de camino. Algo que me sorprendió es que en el briefing dijeron que en una parte de puentes y ríos situada al principio no se podía correr, prohibido adelantar, y aun siendo el principio que la gente va con muchas ganas, se respetó mucho, y nadie adelantó.

Y casi igual que en Chamonix hacía unas semanas, a poco más de las 5am frontal fuera, ya clareaba mucho y el paisaje era espectacular, muy idílico, muy “Heidi”. 




Después de una larga y dura subida de “varios pisos”, y llegué al control, "First", 1a prueba superada!
Llegando a First

Ahora tocaba bajar por una larga e empinada bajada, prácticamente todo pista, había momentos que las piernas dolían por la bajada y la inclinación continua pero estaba disfrutando muuucho… 


...hasta que llegué al control, Bort, km 17.4, remontadores de pistas de esquí, aproveché para comer algo de lo que llevaba porque el avituallamiento sólo tenía “comida superficial”(geles y barritas) y ahora sí, para arriba, volvíamos de nuevo a subir a “First” pero por otro camino, sendero precioso pero también largo, tocaba recuperar todo lo que habíamos bajada… enseguida me di cuenta que esta carrera todo subiría o bajaría… poco plano…


De momento cielo azul y fresco, genial, el sol ya empezaba a brillar con fuerza pero todavía no calentaba mucho, en la sombra el Buff no sobraba.
La carrera estaba ahora ya estirada, cada uno más o menos en su lugar, aunque quedaba mucho mucho…


Era increíble porque en tu camino se cruzaba alguna cabra montesa que te miraban sorprendida… a una que fue un rato detrás del corredor que llevaba delante le hice una foto para un amigo, Alberto, que la semana pasada habíamos “hablado de ellas” por Núria jeje…, madre mía como subían y bajaban, ya me gustaría tener su habilidad y soltura jeje….


Después de sendero y más sendero hacía arriba de nuevo en First, y justo, por el otro camino también a First llegaban los corredores de la distancia de 51 y nos juntábamos, a partir de aquí se notaría que los caminos estaban mucho más llenos y ruidosos, ya que los de esta distancia llegaban frescos y con un ritmo mucho más rápido que el nuestro, que íbamos con dorsal negro y ellos azul.


Ahora estábamos en el km 22.7, comí algo, llené agua y tocaba una bajada corta pero también muy directa hasta Oberläger/Bussalp, km 30.1, aquí de nuevo a comer algo y llenar bien agua porque ahora de nuevo subida de KMVertical hasta el punto más alto de la carrera, Faulhorn, km 33.1, a 2.6681metros, vistas preciosas.




Faulhorn 2.681m
Desde el inicio de la carrera muy pendiente del reloj por los tiempos de corte pero de momento llegaba con margen pero quería mantenerlo para ir tranquila por cualquier cosa que pudiera pasar y sobre todo para la 2ª parte de la prueba dónde ya el cansancio se notaría.




Ahora de nuevo bajada también de KMVertical, con alguna minisubida, a partir de aquí ya se acaba la parte “cómoda” de la carrera y empezaba la “fiesta”, piedras y más piedras, tarteras…

Hacía bastante calor y empezaba ya, al menos para mí, a no disfrutar de la bajada y a reducir el ritmo de avanzar. Al haber más corredores porque de momento íbamos las dos distancias juntas, había momentos de un poco de tapón.

Próximo control, Schynige Plate, km 44, aquí ya llegué con las piernas un poco cansadas, Y de nuevo más bajada, con alguna pequeña subida, hacia el punto más bajo de la prueba, Burglauenen, km 52.5 dónde teníamos la bolsa que habíamos dejado al principio. Antes de llegar aquí el cielo ya empezó a ponerse gris, y empezaron a caer las primeras gotas tal y como anunciaba la previsión del tiempo para el sábado por la tarde. Al principio paré un momento a meter el móvil en una 2ª bolsa por si un caso porque el resto ya iba bien protegido pero no me puse nada, pero la lluvia empezaba a apretar y veía a todos los corredores ponerse la chaqueta, así que al final en un “miniporche” tipo parada de autobús en medio del bosque paré a sacer el Gore, junto con otro corredor que había también parado con la misma intención… y como suele pasar a veces, basta que pares, te pongas la chaqueta y coloques todo bien para que pare de llover a los 5 minutos y estés deseando quitarte la chaqueta, y lo hice, me moría de calor y no podía esperar a llegar a bajo, fue rápido pero incómodo y ahora ya no encajaba todo en la mochila de la misma manera jeje…

Y ya en pista llegué al control de Burglauenen, meridiano de la carrera, dónde había un gran ambiente, familias y amigos de muchos corredores. Vi de nuevo más corredores abandonar como ya había visto anteriormente, pero aquí era incluso más fácil porque tenías todo predispuesto para hacerlo. 

Burglauenen km. 52.5
Yo aproveché para mojarme en la manguera y lavarme bien la cara y refrescarme, cogí la bolsa pero no me cambié nada, únicamente cogí algo de comida, y el cortavientos más fino por si lo necesitaba por la noche, y aproveché a sentarme y comerme un plato de pasta, y de postre? Pues un donut que me había dejado aquí en mi mochila que nos entregaban, siempre me gusta dejar algo que sepa que me encanta porque es una alegría y un premio para salir de nuevo hacia adelante jeje…
Y con todo recolocado y energías renovadas de nuevo en camino, ahora sí, empezaba la carrera, es ahora dónde has de aguantar y aquellos que llevan la mente más floja les cuesta más.
Al poco rato se separaban ya las dos carreras, la de 51 y la de 101, ellos tiraban hacía la izquierda y bajaban, y nosotros hacía la derecha y subíamos.

El perfil marcaba una primera subida de KMVertical de casi 9 quilómetros y unos 700m de subida hasta la idílica población de Wengen, sede de competiciones mundiales de esquí y con la pista de descenso más larga del mundo, patrimonio de la humanidad y que duerme a los pies del Jungfrau, preciosa. Sólo se puede llegar en tren.

Llegar hasta aquí no fue fácil, se hizo larga y dura, cielo gris pero mucha calor, se empezaba a notar que las piernas estaban cansadas, pero me hizo mucha ilusión llegar aquí dónde además a  nivel de redes sociales son muy activos y había intercambiado tuits y mensajes en Instagram con la gente de turismo.
Era ya el km. 61.3 y ahora tocaba la peor subida, no la última de la carrera pero si la última larga, la que se haría más dura y pasaríamos por uno de los lugares más emblemáticos, cuando vas pasando por un sendero muy estrecho entre cortanieves. 

Siempre vale la pena sonreir a pesar del sufrimiento ;)



Sabía que tocaba apretar dientes y vencer el cansancio, mejor poco a poco y constante que intentar avanzar rápido y fundir fuerzas innecesariamente. Veías corredores exhaustos descansando a los lados… eran poco más de 6 quilómetros que se iban a hacer muy muy largos hasta llegar a Männliche, sabía que aquí perdería todo el tiempo ganado en los otros tramos pero no me agobiaba porque el tiempo de corte era a las 23.00 y llegaba de sobras, todavía tenía incluso hasta luz y el objetivo era llegar de día, y así fue, después de mucho agotamiento e ir compartiendo caras de complicidad con algunos corredores que habíamos ido haciendo goma durante todo la carrera… 


Y que ilusión me hizo empezar a escuchar los primeros gritos de ánimo desde la gente que nos miraba desde un balcón, parecía que no llegaba nunca el final, siempre había una vuelta más… pero sí, llegó, estaba arriba y todavía era de día. 


Aproveché a beber algo de sopa caliente porque a los 5 minutos de estar sentada el frío viento empezó a notarse. Me puse ya el frontal, comí algo de lo que llevaba en la mochila que me apetecía más que las barritas que tenían allí, y sí, una bajada “fácil” por pista, qué bien! Un rato de descanso de piernas y mental. Salí antes que el grupo de corredores que había en el control, algunos con las familias ya que había acceso con coche. Después de despedirme del amable grupo de personas del avituallamiento salía con buen ritmo de bajada, al poco ya encendí el frontal.


Y después de un rato de bajada, cruzar algún río y demás, de nuevo subida, corta pero con pendiente para variar, y aquí algo sorprendente que me pasó… Iba sola subiendo y a lo lejos vi un punto de piedra muy bien señalizado y me sorprendió ver que también al lado había unos pilotos de bici rojos y pensé que realmente estaba muy bien señalizado pero mi sorpresa vino cuando tuve la sensación que los pilotos se movían y casi cuando ya estaba delante la luz de mi frontal alumbró un lobo… no sé quiénn de los dos se quedé más atónito, si “él” o yo… Yo recuerdo que dije en voz baja “A Wolf…”, cosa que luego al recordar me hacía reír sola… El animal no hizo nada, se dio media vuelta y se fue a su ritmo  y yo me quedé muy sorprendida, no me dio miedo, sino realmente me pareció insólito y fascinante… Pero bueno, seguí subiendo después de este encuentro a la luz de la luna jeje…

Y una vez arriba, un poco de llaneo y para abajo, y aquí justo al empezar a bajar vi que un grupo de corredores subía, y como yo, nos habíamos equivocado habíamos cogido la pista ancha y tendríamos que haber tirado un poco más a la derecha, menos mal que en mi caso fueron sólo 5-10 minutos y remontar lo poco que había bajado. Aquí me junté con Bernd, corredor alemán que desde el principio habíamos estado haciendo goma. Tocaba bajar un rato por camino, sendero…bosque, había muucha humedad, sudando de madrugada y en los Alpes, insólito si pienso en otras carreras, aunque es cierto que ésta misma el año pasado tuvo muy mal tiempo. 



Y aquí empezaba “mi carrera”, la parte más dura de la prueba, no sé si era el calor, las malas sensaciones de estómago o simplemente la dureza de la carrera pero me empecé a sentir fundida, estaba muy cansada, y lo peor que es que me dormía literalmente, buff… Al llegar al control de Kleinte Scheidegg km 77.8, dónde por cierto había corredores incluso durmiendo/descansando, necesité sentarme y “coca cola en vena”, no tomo café aunque si hubieran tenido creo que incluso lo hubiera aceptado, así que me senté nada más entrar para descansar, y vino un hombre a preguntarme y sólo era capaz de decir “I need Cola”, codos en las rodillas y cabeza apoyada sobre las manos, cerré los ojos unos segundos, necesitaba recuperarme, coger fuerza para lo que quedaba… A diferencia del resto de la gente, me levanté y salí junto con Bernd  y tocaba subida… Bufff dura dura dura… es en esos momentos bajos de la carrera dónde te haces mil preguntas sin respuesta que básicamente se reducen en una “qué hago aquí sufriendo tanto?”, y bueno, mil respuestas pero sólo una válida en ese momento, “merece la pena” y a seguir…

A ritmo muy muy lento llegamos al Alpiglen, km 86.7 y cogí agua y comí algo pero casi nada, no me entraba nada, eso sí, seguí con Coca Cola..

Menos mal que ahora llegaba bajada, para variar de KMVertical, larga y dura, mucha piedra, y lo que todavía no habíamos visto, nieve…Tocaba cruzar tramos de nieve… Cruzar algunos ríos y tramos dónde había carteles de “Peligro” porque era estrechos senderos con precipicios que no se veía el final y cualquier error al pisar… En algunos tramos había personal de la organización para ayudarte a pasar… Fue en un tramo de esta bajada de piedra suelta dónde me resbalé y me di un fuerte golpe en el codo al caer de lado que incluso llegué a pensar que me lo había roto… pero al levantarme e intentar coger el palo y ver que podía me di cuenta rápido que sólo había sido el golpe, a seguir bajando entonces… se hizo muy larga… Seguía haciendo mucho bochorno, con el chaleco cortavientos de sobras, y llegamos al control del km 92.8, Marmorbruch, estaba fundida… 

Recuerdo que me senté de nuevo (yo que soy ni de casi parar, sólo lo justo), el estómago no me aceptaba nada, pero sí, Coca Cola de nuevo. Y fueron 2km de subida que se me hicieron eternos, duros, no sabía ya de dónde sacar las fuerzas, suerte que al ir con el otro corredor alemán nos íbamos animando y cruzando miradas de complicidad, me iba parando a ratos para intentar coger fuerzas, no veía el final… Hasta que por fin llegamos arriba, había sido mucho más desnivel del que nos habían dicho en el avituallamiento… En lugar de ir hacía Grindelwald parecía que nos alejábamos, tortura psicológica…

Pero no importaba, ya era igual, estábamos arriba, Pfingstegg, km 94.8, no era el final, y todavía quedaba parecía ser alguna pequeña subida pero prácticamente ya estaba más o menos hecho.

Y de nuevo frontal fuera y empezando un nuevo día en la misma carrera… Costó porque parecía imposible llegar a Grindelwald aunque lo viéramos, se juntó con nosotros otro corredor alemán, Franz, que también habíamos compartido algunos kms desde el principio… Miraba el reloj y veía la cantidad de tiempo invertido en esta última parte de la prueba pero no importaba, lo importante era llegar a meta…

Y costó, y mucho, pero pasadas las 6.30 de la mañana entré a meta muyyyyyyy feliz junto con los otros 2 corredores alemanes, Bernd y Franz, qué alegría!!! Como había costado, y sobre todo al saber que de los 603 corredores salidos sólo habíamos llegado a meta 357, así que muyyy contenta por haberlo conseguido :)


Y sobretodo los valores que te aporta este deporte, qué grande también es el compañerismo entre corredores que no nos conocemos de nada y pasamos momentos tan duros juntos, o la capacidad de esfuerzo y lucha por conseguir aquello que deseamos… Ésto es la ultradistancia y el porqué este deporte me tiene enamorada hace ya más de 7 años! :)

Despertarte después de 3 horas porque tocaba dejar el hotel y sentirte muy cansada pero muyyyy feliz, y sin ningún dolor muscular es increíble! (Gràcies Albert pel rendiment de les meves cames!!). Merece la pena todo esto y mucho más! Sé que suena difícil de entender al resto de la humanidad que los corredores de larga distancia seamos capaces de practicar este deporte aún y el sufrimiento, para mí, es una filosofía de vida!! :)

Cada vez un paso menos hacía la última etapa de mi sueño… The last desert;)

2 comentarios:

  1. Enhorabuena campeona, vaya sufrimiento pero conseguistes cruzar la meta, es la recompensa de tantos Km. de carrera ,has tenido espectadores singulares tanto la cabra como el lobo. Besos

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  2. Muchas gracias!! :) Besos a los dos!

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Everest Base Camp (September 2012)